Los hermanos Brotogeris - Segunda Versión

En un bosque tropical vivían unos loros muy hablantines. Eran originarios de Puntarenas, Jesse el mayor había salido del huevo un minuto antes que su hermano Walter. Siempre estaban colgando de las ramas de los árboles. Eran muy traviesos y curiosos. Todo el tiempo estaban metidos en problemas.

Los hermanos compartían varios árboles con otras especies de psitácidas. Eran tan traviesos que el grupo no sabía qué hacer con ellos y aunque eran familia los Brotogeris o Brotos, ese era su género, desesperaban a las demás aves.

Las psitácidas son aves muy sociables y aman vivir en grupo. Los Brotogeris son aves muy curiosas y siempren andan trepándose por todo lado. Tienen debajo de sus picos plumitas de color anaranjado, en algunos lugares los llaman pericos barbinaranja o catitas.

Un hermoso y soleado día el grupo les asignó una misión: debían buscar un lugar que tuviera muchos árboles frutales ya que donde vivían la competencia era dura debido a que no eran las únicas aves que comían de los árboles cercanos.

Walter y Jesse se pusieron muy emocionados con su nueva misión. Necesitaban gastar toda esa energía en algo interesante. Alistaron sus pequeños salveques con mucha comida, un viejo Aratinga nana llamado Darwin les regaló una gran guayaba para que merendaran a medio camino. Las catitas volaron por varias horas hasta que divisaron un gran árbol de mango. Decidieron descansar y echarse una pequeña siesta. En eso estaban cuando un sonido de hojas moviéndose los despertó y como eran bien curiosos, empezaron a revisar el árbol y se encontraron con dos grandes ojos color ámbar.

-¿Qué sos?- preguntó Walter.

-Hola, soy un búho.

-¿Un búho?- dijo Jesse que no dejaba de admirar los grandes ojos del animal.

-Sí, un búho. Me llamo Oropopo y estaba descansando cuando un mango casi me golpea, como ven, ya están muy maduros y empiezan a caer.

-Ah...un mango - dijo Walter recordando el dulce sabor de la fruta.

-¿Y qué andan haciendo por aquí? - preguntó Oropopo.

-Diay...- dijo Walter- es que nuestro grupo necesita encontrar un nuevo lugar para vivir porque no hay suficientes árboles frutales para comer.

-Yo conozco un lugar con muchos árboles de mandarina, guayaba, limón dulce y otros que no me sé el nombre- les dijo el búho.

-Eso suena muy bien- dijo Jesse aleteando de la felicidad.

Oropopo muy amablemente les indicó por donde debían volar y en pocos minutos estaban en un bello lugar con muchos árboles. Se memorizaron bien la ruta y volvieron de nuevo a su bosque y avisaron a su familia que gracias a un hermoso búho con ojos muy grandes habían encontrado el lugar ideal para vivir. Todas las aves llegaron y felicitaron a los Brotos por su misión exitosa.